martes, 27 de diciembre de 2011

Artículo de opinión

BUENOS Y MALOS APODERADOS

Nadie discute que la figura del empresario, del ganadero, del aficionado y, sobre todo, del torero, son indispensables y fundamentales en la celebración de espectáculos taurinos pero yo hoy me quiero detener en otra pieza clave en el mundo de los toros: el apoderado. El apoderado es la persona o el grupo de personas encargadas de gestionar la carrera de un matador de toros, novillero o rejoneador. Es el hombre que se ocupa de hablar con las distintas empresas para que su torero sea contratado en la feria o plaza propiedad de un determinado empresario. Si tuviéramos en cuenta sólo estas funciones estaríamos hablando, en definitiva, de un hombre de negocios, de un manager. Pero el apoderado debe ir mucho más allá si quiere ser un buen apoderado. Éste no solo debe cuadrar las liquidaciones y hablar en nombre del torero a la hora de las negociaciones económicas, sino que debe ser la persona de confianza de su matador, un hombre que se ocupe en cuerpo y alma de su torero. Desgraciadamente, hoy en día, vivimos una época de escasez en cuanto a este tipo de apoderados. En el escalafón predominan los hombres de negocios que solo piensan en sus intereses, en el dinero y en explotar al máximo las posibilidades de su torero. Este tipo de apoderados se caracterizan por aparecer en el momento en el que un matador de toros o novillero empieza a coger fuerza y las empresas luchan por contratarlo en sus ferias. Son apoderados que, sabedores de las cualidades del torero en cuestión, solo quieren resultados a corto plazo, los máximos beneficios posibles y no siempre las mejores condiciones y garantías para la persona que llevan a su cargo. También suelen caracterizarse porque cuando creen que han sacado todo el “petróleo” y el pozo está seco dejan tirado como una colilla al torero para que éste se busque la vida y encuentre a alguien que le apoye en sus horas bajas. Y mejor no hablar de esos apoderados que lo único en lo que se ocupan es de afeitar o madar afeitar (que es lo mismo) todas las corridas de su torero. A esta clase de apoderados yo los llamo barberos. La conclusión de todo esto es que ya casi han desaparecido los buenos apoderados, aquellos que cogían a un torero porque de verdad creían en él y se dejaban la vida y la salud luchando por los intereses de su matador. Estos apoderados miraban a corto y a largo plazo y no sólo se ocupaban de las cuestiones económicas y de despacho, sino que se preocupaban de ayudar y corregir artísticamente a su torero. Grandes eran los consejos antes, durante y después de cada tarde en el ruedo y muchas las broncas por los errores cometidos. Ahora, en cambio, esos nuevos o malos apoderados lo único que hacen es dar la coba a su torero cuando todo sale bien y, cuando las cosas no salen, se callan o le dicen que la culpa ha sido del toro o del público y que al día siguiente se dará mejor. Actualmente esos malos apoderados suelen ser además ganaderos y empresarios, utilizan el “cambio de cromos” para contratar a sus toreros y suelen pertenecer a grandes y clásicas familias del mundo del toro. Creo que todos ustedes tendrán en mente a esos apoderados a los que me refiero y por eso no me voy a detener a nombrarlos. Lo que si voy a hacer es escribir algunos nombres que si considero buenos apoderados y que son la minoría hoy en día. Antonio Corbacho sería uno de ellos, aunque para mí el mejor es Santiago López. Este es uno de esos hombres que, aunque cobran grandes cantidades de dinero, se ocupan en cuerpo y alma de su torero, lo “cuidan” y buscan siempre no sólo el interés particular. Estos apoderados suelen dirigir siempre la carrera de un sólo torero, no como las grandes casas empresariales y apoderados que pueden llevar una misma temporada a media docena de espadas. Estos dos apoderados los cito porque les sonarán y porque son de los más importantes que hay en la actualidad, pero hay muchos otros, casi anónimos, que siguen creyendo y luchando en cualquier lugar y ante cualquier persona por “su” torero. Pocas cosas hay mas bonitas que esa persona que se fija en un torero en una plaza o en un tentadero y que, con todo a contracorriente y luchando contra viento y marea, apuestan por las condiciones de un chaval que quiere ser torero. Y cuando esto ocurre y además el carácter de ambos es parecido, surge una conexión, una unión que muchas veces terminará sin los frutos esperados, pero que otras, en cambio, concluirá con la ascensión a la cima del toreo de un novillero o matador de toros. Y por citar solo dos ejemplos hay están dos figurones del toreo como “Joselito” o José Tomás. Así que, hay muchos apoderados pero los aficionados, creo, que debemos distinguir entre buenos y malos apoderados.

martes, 20 de diciembre de 2011

Artículo de opinión

QUE DIOS NOS PILLE CONFESADOS

Ayer mismo conocíamos la decisión de la Comunidad de Madrid de excluir a la UTE Tomás Entero del concurso para la adjudicación de la plaza de toros de Las Ventas de Madrid. Si hace una semana terminaba el plazo para presentar las candidaturas y ofertas pertinentes, ayer la Mesa de Contratación encargada de evaluar las distintas ofertas presentadas para concursar por la primera plaza del mundo, hicieron pública su decisión de excluir de dicho proceso a la segunda empresa que se había presentado. Como todos recordarán hace varias semanas se presentó en rueda de prensa la oferta de la empresa Taurodelta para concursar por el coso que ha gestionado en los últimos años. Y en esa rueda de prensa se presentó oficialmente la unión de tres de las empresas mas poderosas e influyentes del sector: los “choperitas” padre e hijo se aliaban con uno de sus principales oponentes y rivales: Simón Casas. El empresario francés resignado porque sabía que, de nuevo, la CAM no le concedería la plaza con la que tanto tiempo lleva soñando gestionar, decidió “bajarse los pantalones”, dejar de lado sus propuestas e iniciativas “revolucionarias” para salvar la fiesta e integrarse en la empresa a la que tanto había atacado. Junto al dúo formado por los “choperitas” (José Antonio Martínez Uranga y su hijo Manuel Martínez Erice) y Simón Casas, entraba también en Taurodelta Toño Matilla, otro taurino de “postín”. La noticia de la unión de fuerzas de estos empresarios para formar la nueva Taurodelta y presentar una candidatura invatible y sin precedentes para hacerse con el coso venteño fue una auténtica “bomba de relojería” que no dejó a nadie indiferente en el mundo del toro. Parecía que nadie se iba a presentar al concurso por Las Ventas porque todo el mundo sabía que la concesión de la plaza era ya un hecho, pero Tomás Entero no se resignó, se unió a varios empresarios como Rui Bento y Beca Belmonte y presentó su candidatura para un coso al que ya había aspirado en numerosas ocasiones. Pero su oferta era una mera anécdota en este proceso y así se confirmó en el día de ayer al ser expulsada del concurso. Ahora Taurodelta se queda sola por lo que podemos decir que será la empresa que gestione la plaza madrileña durante las próximas temporadas. Para algunos esta noticia será positiva, pero para mí no. El nacimiento de esta nueva Taurodelta ha sido un auténtico golpe de estado porque ha imposibilitado que otras empresas pudieran presentarse al concurso con alguna posibilidad y porque lo que se necesita en este momento en la fiesta es competencia, una competencia que haga que los distintos estamentos de la fiesta se esfuercen y se encaminen en solventar los numerosos problemas que sufre actualmente el espectáculo. Tenemos que recordar que Taurodelta ha sido la empresa que ha gestionado destastrosamente mal el coso de Las Ventas durante las últimas temporadas. Los aficionados madrileños (entre los que me incluyo) estaban hartos de estos señores y lo que necesitaba Madrid era un cambio, no más de lo mismo porque no les quepa duda que lo que sucederá en los próximos meses y años en Las Ventas será un reflejo de lo que ha pasado estos últimos años. Los “choperitas” lo han hecho muy mal pero es que en Madrid desembarcará el “productor de arte” Simón Casas que para mí es el rey del toro chico y un empresario absolutamente “torerista”. Ahí están Nimes y Valencia, ahí está el toro que ha salido en esas plazas desde que el señor Casas es su empresario. Era una auténtica amenaza que este señor llegara a la plaza más importante del planeta taurino, pero si lo hace de la mano de los que se han estado cargando la afición de Madrid los últimos años, la cosa es todavía peor. Y por si todo esto fuera poco, hay que sumar a otro de los empresarios que menos se preocupan del toro y del aficionado: Toño Matilla. Hay que esperar y no quiero ser agorero, pero el que avisa no es traidor y yo solo puedo decir ante este “triunvirato” empresarial lo siguiente: Que Dios nos pille confesados porque, que no se nos olvide, del futuro de Las Ventas depende el futuro de la fiesta de los toros y lo que pase en su ruedo será la mejor arma para salvar o, definitivamente, acabar con el arte del toreo.

martes, 13 de diciembre de 2011

Artículo de opinión

LA ESCUELA TAURINA DE ALBACETE, ¡BASTA YA!

Hace más de dos meses, concretamente el 4 de octubre, publiqué en este mismo espacio un artículo denunciando la situación de la Escuela Taurina de nuestra ciudad. Más de dos meses después, la situación en dicha institución no ha cambiado y todo sigue exactamente igual. Por eso he decidido volver a la carga y hasta que la sociedad albaceteña y los encargados en modificar la Escuela, los políticos, no me hagan caso, seguiré semana tras semana, y sin descanso, denunciando lo que pasa en la que se supone es la fábrica de nuevos toreros y promesas de la tauromaquia de Albacete. Mientras otras escuelas taurinas con la mitad, o menos, del presupuesto de la de nuestra ciudad van sacando, a pesar de la difícil situación por la que atraviesa el sector, a nuevos chavales que apuntan cosas y maneras, nuestra ciudad, nuestra tierra, continúa esperando que algún torero que se haya formado en nuestra Escuela Taurina despunte y llame la atención. Pero es que el problema no es solo de los chavales ni de la situación económica actual, el verdadero problema reside en como está estructurada la institución y de sus responsables directos, los maestros. Lo que sucede en la Escuela no es ningún secreto, todo el mundo del toro, y no sólo del toro, sabe lo que pasa en ella, y todos sabemos que esa situación es insostenible. Pero, a pesar de esto, aquí todo el mundo involucrado en el asunto sigue con los brazos cruzados esperando, quizás, que el problema se resuelva por arte divino. Lo más grave de todo esto es que los chavales, los alumnos de la Escuela Taurina de Albacete, no hablan porque tienen miedo. Sí señores, han leído bien, tienen miedo y les diré a qué. Tienen miedo de perder las pocas oportunidades que se les dan de torear, las pocas novilladas que tienen para demostrar sus cualidades y si valen o no para continuar en la difícil y dura carrera de matador de toros. Si hablan, si dicen que en la Escuela no aprenden absolutamente nada, o peor, que “desaprenden”, temen que contra ellos se produzcan represalias, los maestros les cojan manía y, a la postre, no les den ninguna oportunidad y se queden en su casa sentados y sin torear. Ellos son los perjudicados en esta situación, ellos son los que se están jugando su futuro y, por ello, deberían tener el suficiente valor de olvidarse de todo y gritar a los cuatro vientos lo que ocurre en nuestra siempre valorada y estimada Escuela Taurina. Pero como tienen miedo, yo me veo en la obligación de alzar la voz y decirles a todos ustedes y al concejal de Asuntos Taurinos, Manuel Serrano, que la Escuela necesita de una inmediata renovación, un cambio de rumbo para que en el futuro los albaceteños puedan presumir de que en su tierra continúa habiendo buenos toreros, grandes profesionales e, incluso, alguna figura del toreo. En la Escuela Taurina no sólo se debería enseñar a coger los trastos y a torear, ni eso se enseña, sino que debería ser un centro de una formación taurina completa que empieza por abordar de forma teórica todos los ámbitos de la tauromaquia.

martes, 6 de diciembre de 2011

Artículo de opinión

UNA NUEVA AMENAZA: LAS CORRIDAS SIN MUERTE


Estas últimas semanas esta siendo noticia dentro y fuera de nuestras fronteras, en el “planeta taurino”, las corridas sin muerte que se han empezado a celebrar este año en la plaza de toros de Quito. Ecuador ha sido siempre uno de los países con más afición a la fiesta de los toros y la feria de su capital, uno de los ciclos taurinos más importantes de toda la temporada americana. Pero, al igual que pasó en Cataluña con la prohibición de las corridas de toros, los políticos de ese país se han metido entre los aficionados y su libertad para acudir a una plaza de toros. Ellos no han ido tan lejos como nuestros queridos políticos catalanes porque no han llegado a prohibir las corridas de toros. Lo que han hecho ha sido prohibir la muerte del toro en el ruedo. Ahora en vez de por una estocada en el ruedo, ante un público y luchando hasta la muerte, los astados que se lidien en Quito serán sacrificados con un tiro en los corrales del coso taurino. He dicho que los políticos ecuatorianos no han ido tan lejos como los catalanes aunque no se que es peor: si prohibir las corridas de toros o mutilarlas prohibiendo la celebración de la suerte suprema. Si la llamamos así es porque la suerte de matar es la fundamental, la más importante de cuantas tienen lugar en la lidia y por ese motivo si falta la suerte suprema, falta lo más importante de la lidia de un toro. El toro bravo se cría para morir en el ruedo no para que lo sacrifiquen a escondidas y sin el honor que se merece. Antes que ver una corrida de toros sin muerte en el ruedo, prefiero no ver ninguna y quedarme en mi casa o ver vídeos de otros tiempos en los que no sólo no se perseguía y atacaba a los aficionados taurinos, sino que la Tauromaquia se fomentaba y apoyaba. Pero una vez hecha mi denuncia contra los políticos que han mutilado la fiesta de los toros en Ecuador, también quiero denunciar y manifestar mi disconformidad con todos los matadores de toros que se han anunciado en la Feria de Quito y que van a participar en estos “simulacros” de corridas de toros. Han sido muchos los toreros que van a participar, o que ya lo han hecho, en este tipo de festejos. Hay desde figuras del toreo como Enrique Ponce o Sebastián Castella, hasta toreros emergentes como David Mora. Ellos han aceptado acudir al país americano para tomar parte en este tipo de corridas y en mi opinión no hacen ningún bien a la fiesta. Todos aquellos que participen y que ganen dinero con este tipo de festejos son cómplices de los políticos totalitaristas que han tomado la decisión de suprimir la suerte suprema. Ellos son matadores de toros y, por lo tanto, su principal función es matar al toro en el ruedo. Si no lo hacen, a mi juicio, estarán manchando el honor y el prestigio de su profesión. Los que se han apuntado a estas corridas dicen que lo hacen porque para defender las corridas tradicionales hay que ir allí y torear y manifestar su desagrado y porque, dicen, los aficionados quiteños también tienen derecho a disfrutar de la fiesta taurina, pero no estoy de acuerdo por los motivos que he planteado anteriormente. Lo que hay que hacer es negarse a participar en ese tipo de corridas, plantarse y hasta que no se revoque esa decisión no viajar a Ecuador. Si no, los políticos abolicionistas habrán ganado la batalla y no retrocederán en sus decisiones. Ahora todos dicen que están en contra de ese tipo de corridas de toros, pero yo me pregunto entonces: ¿por qué han ido?

martes, 29 de noviembre de 2011

Artículo de opinión

MANZANARES, EL TRIUNFADOR DE LA TEMPORADA


Si la temporada taurina 2011 ha dejado un nombre propio, ese es el de José María Manzanares. Manzanares ha sido el absoluto triunfador y protagonista de una campaña que ha sido rotunda en su conjunto y que ha dejado tardes históricas como la del indulto del toro Arrojado en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Esa tarde, el 30 de abril, José Mari hizo historia al indultar a un bravo ejemplar de Cuvillo y poner patas arriba la Feria de Abril y todo el devenir de la temporada. Porque la campaña 2011 ha estado marcada por el inmejorable comienzo de temporada de Manzanares que consiguió abrir las tres puertas grandes más importantes de la primera mitad del año: Valencia, Sevilla y Madrid. Para mí Manzanares ha sido el triunfador de esta temporada en su conjunto aunque he de reconocer mi debilidad por Alejandro Talavante que ha firmado, en mi opinión, las dos faenas más importantes de toda la temporada 2011: la de Madrid ante Cervato y la de Zaragoza ante Esparraguero. La campaña de Talavante ha sido la mejor de su carrera, la más regular pero aún no ha alcanzado la rotundidad y regularidad de triunfos y puertas grandes que consiguiera El Juli el año pasado y José María Manzanares este año. La temporada de Manzanares ha sido la de un torero cuajado, maduro y que ha conseguido movilizar a una parte muy importante de público y de aficionado que ha llenado, la mayoría de las tardes, los tendidos de los cosos en los que actuaba el alicantino. Si en otras décadas vivíamos en una era poncista o tomasista, la de 2011 ha sido la temporada manzanarista. Creo que en ocasiones esta tendencia ha producido un cierto triunfalismo exagerado y que se han concedido demasiadas orejas y cantado en exceso algunos triunfos, pero también he de reconocer que Manzanares se ha ganado en el ruedo ese viento a favor entre el aficionado y la prensa taurina. Porque José María además de reunir en su concepto del toreo una gran templanza, profundidad, largura y empaque, es una persona con un gran carisma que se hace querer y que se ha convertido en un personaje muy querido e influyente también fuera del mundo del toro. Su cercanía con los aficionados, su constante y activa participación en las nuevas herramientas de comunicación y en las redes sociales, su educación exquisita a la hora de hacer declaraciones y ser entrevistado... todos esos son factores que también hay que valorar y que hacen de Manzanares un auténtico personaje público dentro y fuera de los ruedos. Pienso que aún puede seguir evolucionando y que puede llegar a un nivel pocas veces visto en la Historia del Toreo pero sus tardes en Valencia, Sevilla, Madrid, El Puerto o Barcelona ponen de manifiesto que Manzanares es ya una auténtica figura del toreo y que tiene una capacidad fuera de serie. Eso sí, creo que es momento de reconocer sus virtudes y aciertos y también hacerle peticiones como la de que abra más el abanico de encastes que mata y no se anuncie siempre con las mismas ganaderías pertenecientes al monoencaste Domecq. Parece que todos estamos de acuerdo en que la temporada 2010 fue de El Juli y que la de 2011 ha sido la de Manzanares, por lo que termino planteando una pregunta que tendrá su respuesta el año que viene por estas fechas: ¿de quién será la temporada 2012? Yo apuesto por dos toreros muy parecidos en su forma de concebir el toreo: Alejandro Talavante y el gran José Tomás.

martes, 22 de noviembre de 2011

Artículo de opinión

CAMBIO POLÍTICO, ¿CAMBIO EN LOS TOROS?


Como se esperaba el Partido Popular ha ganado las elecciones y además con una mayoría absoluta holgada y muy cómoda para poder gobernar en esta nueva legislatura que comenzará en los próximos meses. El lema de su campaña era “Empieza el cambio” y así ha sido, finalmente ha llegado el cambio. Pero lo que me pregunto yo es si el cambio también llegará a “nuestro” mundo, el mundo taurino. Está claro que España necesita de nuevas políticas para regenerar el empleo y lograr vencer a la crisis económica que nos asfixia y que tanto daño está haciendo a la sociedad, pero si España necesita de un cambio político, la fiesta de los toros también necesita un profundo cambio y renovación. El anterior gobierno socialista nos daba una de cal y otra de arena: por un lado, se reunían con los toreros y accedieron a traspasar las competencias taurinas del Ministerio del Interior al de Cultura como solicitaban los toreros, o decía que ellos eran contrarios a las prohibiciones, pero también era una realidad el aislamiento y el continúo desprecio de muchos de sus dirigentes hacia la fiesta de los toros. La tauromaquia vive sus horas más difíciles y cada vez son más los que atacan y menos los que defienden. Por eso es necesario que el gobierno de nuestro país apoye, proteja y fomente la fiesta de los toros como un arte único de España y como el segundo espectáculo de masas de este país, detrás del fútbol. Yo no me fío nada de los políticos que siempre van a favor de sus intereses y dicen lo que les conviene en cada momento. Por eso no doy saltos de alegría con la entrada del PP al gobierno, porque no me fío de sus buenas intenciones relativas a la fiesta nacional. En su programa recogían la propuesta de defender y fomentar la fiesta de los toros pues bien, han conseguido la mayoría absoluta así que a ver si es verdad y lo hacen. También nos han prometido muchas veces que con su vuelta a La Moncloa los toros volverían a la televisión pública, esa que pagamos todos los españoles de nuestros bolsillos y de la que habían sido desterradas las corridas de toros desde hace muchos años. Espero que cumplan su palabra y los toros vuelvan, una vez por todas, a TVE. Por último, hace algunos meses el grupo popular en el congreso hizo una propuesta para que los toros fueran declarados Bien de Interés Cultural en el conjunto de España pero dicha solicitud fue rechazada con los votos, entre otros, del grupo parlamentario mayoritario, el PSOE. Algunas comunidades autónomas gobernadas por el PP como Valencia, Madrid o Castilla la Mancha han declarado ya o declararán dentro de poco los toros BIC. Es un buen precedente pero lo que tiene que hacer ahora el nuevo gobierno (además de otras tantas cosas urgentes) es declarar los toros Bien de Interés Cultural en toda España porque ahora que tienen la mayoría absoluta pueden hacerlo sin problema. Y otro frente que queda abierto es el de Cataluña. Esperemos que como nos han dicho luchen con todas las armas jurídicas a su alcance para revocar la prohibición de las corridas de toros en esa comunidad autónoma. En definitiva, muchas son las promesas y veremos cuantas se tornan en hechos. Ya hay un cambio político, pero ¿habrá también un cambio en la defensa de los espectáculos taurinos?

martes, 15 de noviembre de 2011

Artículo de opinión

EL MEXICANO, UN TORO MÁS QUE "CÓMODO"


Una vez terminada la temporada en España, la actualidad taurina se traslada hasta el continente americano dónde durante los próximos meses se celebrarán las distintas ferias taurinas que componen la temporada americana. La mayoría de las figuras del toreo cruzarán el charco para tomar parte, junto a los diestros locales, en los ciclos taurinos que se celebren en México, Colombia, Perú, Venezuela o Ecuador. Y una de las ciudades que concentrarán la atención de los aficionados será la de México D.F. donde ya ha comenzado a celebrarse “su” Temporada Grande. En el coso de “Insurgentes” (el más grande del mundo), se medirán las figuras del toreo más importantes de España y México. Ya han hecho su aparición diestros como Enrique Ponce, Alejandro Talavante, Arturo Saldívar o Diego Silveti y aún quedan muchos más que pasarán por esa importante plaza de toros. Hasta aquí todo bien, pero aún no hemos hablado del otro factor fundamental en el arte del toreo: el toro. Y voy hablar para denunciar el impresentable toro que las figuras del toreo lidian en México capital y en la mayoría de ferias americanas. Cansados del toro y del público español, mucho más serio y exigente, las figuras del toreo hacen gustosas el viaje a tierras americanas sabedoras de que allí cobrarán grandes sumas de dinero, cortaran muchas orejas y rabos y, lo mejor, lo harán ante astados de pobre presencia y de un comportamiento noble y dulce hasta extremos insospechados. Ya se han comenzado a producir los primero triunfos “históricos” y no tardarán en llegar las declaraciones de las figuras españolas alabando la amabilidad y benevolencia del público mexicano y acusando de dureza e insensibilidad a la afición española. Digo que no tardarán porque todos los años pasa lo mismo. No me parece bien que América y en concreto México sea como el patio de recreo de las figuras del toreo porque creo que se le está tomando el pelo a los aficionados de ese continente, pero lo puedo llegar a admitir si prácticamente esos triunfos pasan casi desapercibidos aquí en España. Lo que no admito es que en todos los medios taurinos se comience a propagar durante los próximos meses ese triunfalismo al que nos tienen acostumbrados cuando las “figuritas” matan su “torito” entre los oles y el entusiasmo de unos aficionados que se fijan mucho en las labores y en las “obras de arte” de los toreros y poco en el oponente que éstos tienen delante, el toro. Si las figuras del toreo hacen y deshacen a su antojo en la mayoría de cosos españoles, lo de América y México ya es de juzgado de guardia pero parece que allí nadie dice nada. Cuándo las figuras se enfrenten a un toro digno en tierras americanas yo daré valor y me interesaré por sus triunfos y por esas tardes históricas y gloriosas que tanto se repiten al otro lado del Atlántico. Mientras que en la que se supone es una de las plazas de toros más importantes del mundo (la de México D.F.) se sigan lidiando encierros como los estoqueados los pasados fines de semana por Ponce o Talavante, un servidor tomará sus triunfos y grandes faenas como anécdotas invernales mientras espero el comienzo de la próxima temporada en nuestro país.

martes, 8 de noviembre de 2011

Artículo de opinión

¿QUIÉN SERÁ EL PRÓXIMO EMPRESARIO DE ALBACETE?

Esa es la cuestión que todos los aficionados nos hacemos en este momento: ¿quién será el próximo empresario de la plaza de toros de Albacete? Todos nos temíamos que Serolo continuara como empresario la próxima temporada tras anunciar que pedirían al Ayuntamiento la prórroga a la que tenían derecho y, sobre todo, tras conocer la opinión favorable del Consistorio a conceder dicha prórroga. Como ya he expresado en otras ocasiones, en mi opinión, Serolo no se merecía continuar tras la pésima feria de este año. Pese a las orejas regaladas y el balance triunfalista hecho por la empresa, el equipo gubernativo y el concejal, los aficionados mostraron su desagrado con el resultado del ciclo taurino de nuestra ciudad. Las críticas de las dos asociaciones de aficionados fueron importantes y en el pasado serial fue evidente una clamorosa decadencia en el trapío y la seriedad de las reses lidiadas, el juego manso y descastado en líneas generales y la tómbola en la que se convirtió el palco presidencial tarde tras tarde concediendo orejas que ni el público pidió. Es verdad que Serolo realizó una gran feria en su primer año con encierros muy bien presentados que además dieron un gran juego, pero no es menos cierto que el pasado año bajó mucho el nivel y el desastre se confirmó este año. Pero parecía que la empresa tenía intención de continuar y que el Ayuntamiento se lo iba a permitir, hasta que en la noche del pasado domingo saltó la noticia de que Serolo renunciaba a la prórroga que seguramente se le habría concedido. Yo me sorprendí muchísimo aunque tengo que manifestar que gratamente porque a partir de este momento se abre un período fundamental para la consolidación de la plaza y la feria de Albacete como la más importante de cuantas se celebran en cosos de segunda categoría y demostrar que el nivel y la exigencia de nuestro coso son superiores al de muchas plazas de primera. Y para ello lo primero que hay que hacer es elaborar un buen pliego de condiciones, tarea que tendrá que llevar a cabo el nuevo concejal de asuntos taurinos, Manuel Serrano, que tiene una buena oportunidad de demostrar que es un buen aficionado y que quiere participar activamente en la recuperación del prestigio perdido en las últimas temporadas. Lo principal es que el nuevo pliego cuente con la opinión de los aficionados que, nunca me cansaré de repetirlo, son los que sustentan con sus entradas el espectáculo. También es el momento de plantearse la posibilidad de la autogestión o de la gestión compartida que tiene tan buenos ejemplos como Bilbao o Santander. Y si no se atreven con esta fórmula habrá que ver que empresas se presentan al concurso que se abrirá en los próximos meses. Esperemos que se presenten muchas y que haya igualdad para competir y que gane el que presente una mejor oferta. ¿Volverán los Lozano o los “choperitas”?, ¿repetirá Serolo?, ¿darán cabida a jóvenes emprendedores como Maximino Pérez?... estas preguntas tendrán su respuesta en unos meses.

martes, 1 de noviembre de 2011

Artículo de opinión

LOS AFICIONADOS FRANCESES TOMAN LA DELANTERA

Que el futuro de la fiesta de los toros está en el país vecino, en Francia, no es nada nuevo, pero en la última semana está afirmación ha tomado, de nuevo, actualidad y es una idea que se empieza a consolidar y generalizar. Por supuesto que a los “taurinos” españoles estas cosas no les preocupan porque no miran más allá de sus intereses y las acciones o iniciativas a corto plazo. Al contrario que los franceses, ellos siguen anclados en el siglo XIX y tan sólo se preocupan de que puedan continuar viviendo del toro. Ni si quiera piensan en sus hijos, en las generaciones venideras y que tienen unas expectativas muy oscuras debido a los cada vez más frecuentes y fuertes ataques abolicionistas y a los políticos oportunistas, ignorantes y demagogos. Pero para los aficionados al toro, a la fiesta íntegra y verdadera, nos queda una esperanza, Francia. Creo que en unas décadas (no muchas), el país galo será una especie de refugio, un exilio para los que amamos la tauromaquia. Esta semana conocíamos la noticia de que todas las plazas de toros francesas habían llegado al acuerdo conjunto de subir un veinte por ciento los honorarios de los toreros más “modestos” en detrimento del sueldo que cobran las figuras. A esto sólo tengo que decir: olé. En un contexto de crisis económica en el que todos nos estamos apretando el cinturón y estamos haciendo esfuerzos no se puede conseguir que las grandes figuras del toreo permanezcan ajenas a esta realidad y continúen cobrando las mismas cantidades de dinero que en otros tiempos de bonanza económica. También es una iniciativa que promueve la igualdad en cuanto a que no hay derecho a que matadores que se enfrenten a las corridas más duras y serias, cobren una miseria respecto al sueldo de las figuras. La pasada semana conocíamos también las conclusiones de la recién concluida temporada que publicó la Federación de Sociedades Taurinas de Francia que celebró un congreso para hacer balance de la temporada taurina 2011 en Francia. Este congreso llegó a diversas conclusiones, tanto positivas, como negativas. Y dentro de estas últimas destacaban dos y ambas tenían como protagonistas al llamado G-10, esa especie de coalición formada por las grandes figuras y que se han comenzado a erigir en los salvadores de la tauromaquia. Entre los logros, o más bien, el único logro, de esta “organización” está el paso de la fiesta del Ministerio del Interior al de Cultura. Al margen de esto no han hecho nada más en pro de su profesión y forma de vida. Del toro íntegro, la falta de casta y de bravura que padecen la mayoría de sus ganaderías predilectas, el continuo y cada vez más acentuado alejamiento de la sociedad, en particular de los jóvenes, de la tauromaquia, las preocupaciones de los aficionados…de esas cosas aún parece que no han tenido tiempo para reflexionar y tomar medidas. Pues como decía, entre los puntos negativos que recogían estos aficionados franceses destacaban dos y ambos sobre el G-10. Por un lado, criticaban que en plena crisis económica no sólo no bajen sus honorarios, sino que incluso se los suban en un gesto de muy poca solidaridad con el resto de profesionales y, sobre todo, de aficionados y personas de a pie. Pero el punto que más me llamó la atención fue el siguiente que cito literalmente: “Los toreros del G-10 por sus exigencias en cuanto al futuro de la corrida, particularmente en enfrentarse a toros de pobre presentación, queriendo la mayoría de las veces las mismas ganaderías y siendo éstas, aquellas que no tienen la mejor reputación de fuerza y casta”. Ante esta cita hay poco que comentar porque es, sin duda, el mejor resumen de uno de los problemas y de las amenazas más importantes que tiene la fiesta de los toros actualmente. Además de esto: las empresas francesas cuentan con la opinión de los aficionados a la hora de confeccionar los carteles de las ferias; se preocupan por la variedad de encastes; son justos con los diestros porque los que triunfan y están bien, vuelven y se les da otra oportunidad, y a los que están mal no se les vuelve a llamar; y castigan con dureza los casos de afeitado vetando en todos los cosos de Francia durante, al menos, una temporada a aquellos hierros que hayan sido sospechosos de manipulación fraudulenta de las astas. En definitiva, que en Francia está el futuro para los que queremos y demandamos una fiesta íntegra y sin ventajas y que, como siempre, y en los toros no iba a ser menos, los franceses nos llevan la delantera incluso en un arte, en un espectáculo propio de nuestro país.

jueves, 27 de octubre de 2011

Balance de la temporada taurina 2011

JOSÉ TOMÁS REAPARECE, LAS GRANDES FIGURAS SE REAFIRMAN Y TOREROS MODESTOS SORPRENDEN, MIENTRAS LA CRISIS SE ACENTÚA Y EL TORO DESAPARECE

Ya ha concluido oficialmente la temporada taurina española 2011. Un año más, y tras unos ocho meses de ferias y festejos taurinos, el invierno llega y con él termina la temporada taurina en nuestro país. En los próximos meses en España no se celebrarán festejos taurinos y los aficionados tendrás que resignarse a observar desde la distancia las corridas de toros que se celebren al otro lado del charco, en América. En nuestro país hasta el mes de febrero y, sobre todo, marzo no se volverán a dar espectáculos taurinos pero durante estos meses la actualidad taurina no se paraliza y a partir de ahora comenzaremos a conocer cambios de apoderamiento, bailes en las cuadrillas, conoceremos las camadas de astados que aguardan en el campo para la temporada venidera, sabremos cuáles son las empresas que se hacen con plazas tan importantes como Las Ventas, etc. Muchas noticias nos esperan a partir de ahora, pero antes de mirar al año que viene, es conveniente hacer un análisis a grandes rasgos, un balance de lo que ha sido la recién finalizada temporada taurina española.

La reaparición más esperada

En este resumen que comienzo a hacer de la temporada taurina, los distintos puntos destacados no irán en orden cronológico, sino de importancia. Tomando en cuenta esta consideración, si hay algo que ha destacado sobremanera esta temporada y ha transcendido lo meramente taurino, ese hecho ha sido la reaparición de uno de los toreros más grandes de todos los tiempos: José Tomás. El diestro madrileño reapareció en medio de una expectación máxima e histórica en la plaza de toros de Valencia el 23 de julio junto a Víctor Puerto y el mexicano Arturo Saldívar. Esa tarde todos los ojos informativos estaban puestos en el coso de la Calle Xátiva y Tomás no defraudó a nadie y, a pesar de que el presidente le negó la puerta grande, cumplió con las expectativas y devolvió al toreo la pureza y la verdad de la tauromaquia. Al margen de la corrida de su reaparición, José Tomás actuó en otras ocho ocasiones y sin ser su temporada más brillante debido a las secuelas de su gravísimo percance de Aguascalientes, en todas las plazas que actuó colgó el cartel de “No hay billetes” y movilizó toda la atención mediática.

Las figuras contra la crisis

La temporada 2011 también se ha caracterizado por ser la de la “crisis”. Si bien en las últimas temporadas el mundo del toro también había notado los efectos de la grave crisis económica por la que atraviesa el país, este año sus consecuencias han sido mucho mayores y preocupantes. Se han reducido los festejos en un porcentaje alarmante y las plazas de toros han registrado las entradas más flojas de los últimos años. Ajenos, casi por completo, a la crisis y sus efectos, han estado las grandes figuras del toreo. Ellos han seguido manteniendo sus honorarios, pisando la mayoría de ferias y triunfando tarde tras tarde. Pero no todos lo han conseguido. Los grandes nombres de esta temporada son tres: José María Manzanares, Julián López El Juli y Alejandro Talavante. Los tres han hecho una temporada brillante y muy importante y han conseguido triunfos, no sólo en plazas de segunda y de menor categoría, sino en los cosos y ferias más importantes. Manzanares comenzó a gran nivel la temporada en Valencia, después hizo historia al indultar a un ejemplar de Nuñez del Cuvillo en Sevilla, abrió la puerta grande de Madrid y continúo con su racha en los sucesivos ciclos estivales. Gran temporada la del alicantino aunque también hay que decir que se ha beneficiado de una fuerte corriente triunfalista a su favor que yo denomino el “manzanarismo desbordado” y que pudimos ver, por ejemplo, en nuestra plaza de Albacete. El Juli no ha bajado el listón alcanzado en las últimas temporadas, sobre todo en la del año pasado. El madrileño se ha reafirmado en su condición de maestro y se ha impuesto tarde tras tarde a lotes buenos, malos y regulares. La otra gran figura que ha brillado esta temporada ha sido Alejandro Talavante. El extremeño ha devuelto la ilusión a todos los que apostábamos por él desde que comenzó a despuntar de novillero. Talavante no sólo ha conseguido mostrar unas increíbles y prodigiosas condiciones como torero, sino que también ha alcanzado una de las metas que se le resistían: la regularidad. Ha sido una temporada la suya mucho más regular, con muchos menos altibajos, y con históricas faenas como las realizadas en la Feria de San Isidro ante el toro Cervato de El Ventorrillo o la ejecutada a un astado de Cuvillo en la recién terminada Feria del Pilar de Zaragoza. Si ellos han sido la cara otros como Sebastián Castella, El Fandi o Enrique Ponce han sido la cruz por haber llevado a cabo pésimas temporadas. La de Morante de la Puebla también ha sido mala pero él se ha salvado con el triunfo conseguido en la Feria de Bilbao. El Cid o Perera han sido las otras figuras que sin haber cuajado una mala temporada, tampoco la han conseguido rematar ni que sus triunfos tuvieran regularidad.

Toreros revelación

Dos han sido los matadores que comenzaron la temporada casi en el olvido y la ignorancia de la mayoría de aficionados, pero que la han terminado estando en boca de todos: Iván Fandiño y David Mora. Ambos tienen trayectorias y carreras similares e igual que se hicieron fuertes en las corridas denominadas “duras” y que lucharon con sudor y sangre para estar en las ferias, ambos han conseguido llegar a la primera fila casi al mismo tiempo. Los dos son toreros que además de un grandísimo valor, poseen un muy buen concepto del toreo. David Mora ha sido la sorpresa más grande por su estilo elegante y clásico acompañado de un valor seco y frío y su emerger se ha dado desde mitad de temporada hacia el final. En cambio, el vasco Iván Fandiño comenzó a ascender posiciones desde el principio de la temporada, especialmente tras su notable paso por Madrid dentro y fuera de San Isidro. Ambos se merecen este reconocimiento y esperemos que los empresarios y profesionales les den el año que viene el sitio que se merecen y que se han ganado en el ruedo.

Decadencia del toro

Si el torero y el público son fundamentales en el espectáculo taurino, el auténtico protagonista es el toro. Sin él nada tendría sentido y el toreo no existiría. Por eso debe haber dentro de los aficionados una conciencia de la importancia capital que tiene el toro dentro de la fiesta a la que da el nombre. Esta temporada hemos vivido con tristeza y preocupación la imparable y alarmante decadencia en la presentación y el juego del toro en la mayoría de ferias y plazas. Empezó Valencia con la presentación de astados impresentables que llegaron de la mano del “productor de arte” (como él mismo se denomina) Simón Casas. Después Sevilla en la Feria de Abril consolidando su toro como uno de segunda y no de primera, pero el caso más preocupante llegó después, en San Isidro y en la primera plaza del mundo. El baile de corrales y algunos de los astados que saltaron al ruedo de Las Ventas fueron de vergüenza y ni las sonoras protestas del famoso tendido 7 consiguieron sonrojar a los culpables de tal despropósito. Y si Madrid bajó el listón, las ferias de junio ya fueron el colmo teniendo como máximos exponentes Alicante, Granada o Badajoz. Pamplona también bajó y quizás la única que se ha mantenido en la exigencia de un toro serio y con trapío ha sido Bilbao que comienza a ser el oasis de los aficionados al toro. En septiembre Albacete y Logroño se equipararon a Murcia, Salamanca o Valladolid y lo de Zaragoza este año ha sido de juzgado de guardia. En cuanto al juego destacar los hierros de Núñez del Cuvillo, con algunas excepciones, Fuente Ymbro con una camada muy brava y encastada, Alcurrucén o Cuadri. Dentro de las predilectas e ideales de las figuritas, Garcigrande. El resto han destacado por su mansedumbre, falta de casta y fuerza y por aburrir hasta a las moscas. Grandes toros sueltos han saltado a lo largo de la temporada como “Arrojado” de Cuvillo, “Cervato” de El Ventorrillo, “Guajiro” de El Pilar, etc.

martes, 25 de octubre de 2011

Artículo de opinión

HASTA SIEMPRE MAESTRO CHENEL

Sí, parece mentira pero es verdad, se nos ha ido nuestro querido maestro Chenel, se nos ha ido un torero legendario, se ha marchado para siempre el torero del mechón blanco, el torero del traje lila y oro, el torero que realizó una faena histórica a aquel toro blanco de Osborne llamado “Atrevido”. En definitiva, y esa es la triste noticia, ha muerte el maestro “Antoñete”. Aún tengo el corazón encogido, aún se me saltan las lágrimas cuando vuelvo a ver algunas de sus faenas o cuando recuerdo todo lo que he aprendido de él en todos los años que llevo siguiendo las ferias taurinas mas importantes de la temporada a través de canal plus. Por mi juventud no tuve la suerte de disfrutar de su toreo en directo, en el ruedo de una plaza de toros, pero puedo decir que he tenido el gran honor y la gran suerte de escucharle muchos años y de aprender muchísimo de toros gracias a él. Porque “Antoñete” no hablaba mucho, no sólo era un hombre de pocas palabras, sino que por su avanzada edad y las complicaciones de salud y respiración que padecía no podía decir todo lo que seguro le gustaría contar, pero no hacía falta porque el maestro Chenel con una mirada, con un susurro, con una sola frase, decía mucho más que cualquier otro que se extendiera durante dos o tres minutos sin parar de hablar. Y esa era la genialidad de Chenel: el, sin apenas hablar, decir tantas cosas y, sobre todo, tantas sentencias llenas de sabiduría y torería. Hoy en día a cualquier torero joven o que no ha tenido un sitio importante en el toreo se le llama maestro, pero esto es un gran error porque nos estamos cargando la emotividad, el respeto y la admiración que van implícitos en esa palabra. Un maestro es aquel que por sus conocimientos o experiencias tiene la capacidad de divulgar enseñanzas y hacer aprender a otros sobre algo y tengo que decir que, por lo tanto, hoy en día hay muy pocos maestros en el arte del toreo. Pero uno de ellos, sin duda, era el maestro Chenel, el maestro “Antoñete”. Él si que era un maestro con todas las letras y en todos los sentidos porque nos ha enseñado infinidad de cosas que siempre guardaremos en nuestro corazón de aficionados. Y no sólo de aficionados, sino también en nuestro corazón en general, en nuestro corazón humano porque Antonio, además de un maestro del toreo, un maestro dentro de la plaza, era un maestro fuera de ella, un maestro de la vida. No sólo fue un gran torero “Antoñete”, fue una gran persona y un gran hombre. Como torero siempre recordaremos que fue el máximo exponente del concepto del toreo clásico, ortodoxo, cargado de pureza y verdad; también que descubrió las distancias que requería cada tipo de toro; o como olvidar su mano izquierda y su soberbia media verónica. Fue un matador Chenel muy completo porque además tuvo un gran valor, ya que sólo desde ese desbordante valor y también de su increíble afición y amor a su profesión, se pueden entender sus numerosas retiradas y vueltas a los ruedos y el que con más de sesenta años, en vez de estar sentado en el brasero de su casa, estuviera enfrentándose a un toro y regalándonos auténticas obras de arte como la faena a aquel toro de Victoriano del Río en Jaén en el año 1999. O como olvidar esa faena histórica al toro “Atrevido” de Osborne en Madrid, una obra cumbre que debería ser vista por todo aquel que quiere ser torero. Como persona recordaremos su humor o su guasa, como siempre que aparecía un toro muy serio y armado en el ruedo decía que si a el le hubiera tocado, habría salido corriendo muerto de miedo, o como no recordar con una sonrisa la manía y la superstición que tenía al color amarillo y que nos ha transmitido a nosotros, unos aficionados a los que ya nunca se nos ocurre llevar alguna prenda amarilla a una plaza de toros: o, también la fraternal y preciosa imagen de sus diálogos con el semental, con su amigo, “Romerito”. Nos emocionamos viéndole torear, aprendimos escuchándole tarde tras tarde, nos reímos con sus bromas y comentarios… En resumen le cogimos mucho cariño, hemos sentido mucho su pérdida y lo echaremos mucho de menos pero nos queda la esperanza de recordarle cada tarde que pisemos un coso taurino y nos acordemos de algo que aprendimos de nuestro maestro, del maestro “Antoñete”. Gracias y hasta siempre maestro Chenel.

Muere el maestro Antonio Chenel "Antoñete"


ADIÓS A UNO DE LOS ÚLTIMOS MITOS DEL TOREO, ADIÓS AL MAESTRO ANTONIO CHENEL “ANTOÑETE”

El pasado sábado falleció en Madrid el maestro Antonio Chenel “Antoñete” a la edad de 79 años y tras sufrir una larga enfermedad respiratoria. “Antoñete” fue uno de los toreros más importantes de la segunda mitad del siglo XX y la afición lo despidió ayer lunes en “su” plaza de Las Ventas de la que salió, por última vez, a hombros por la puerta grande.

El mundo del toro despidió ayer a uno de los toreros más importantes y queridos de la segunda mitad del siglo pasado. Era de Madrid y se llamaba Antonio Chenel Albaladejo, pero desde pequeño se le comenzó a conocer como “Antoñete”. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que también acudió a despedir al diestro, anunció que se condecorará a “Antoñete” a título póstumo con la Gran Cruz de Beneficencia del Dos de Mayo y Manuel Cobo, vicealcalde de Madrid prometió que una calle de la capital llevará el nombre de “Antoñete”. El maestro Chenel nació el 24 de junio de 1934 en Madrid y muy cerca de la Plaza de Toros de Las Ventas que, pronto, se convirtió en su casa. Algunos miembros de su familia trabajaban en La Monumental y por eso, desde muy pequeño, “Antoñete” pasó gran parte de su tiempo, de su infancia y de su niñez dentro del coso venteño. Y junto a los aficionados de entonces, a las grandes figuras de los años 40, “Antoñete” comenzó no sólo a aficionarse a la fiesta de los toros, sino a querer ser torero. Y lo consiguió un 8 de marzo de 1952 en Castellón de manos de Julio Aparicio, siendo el testigo el maestro albaceteño Pedro Martínez Pedrés con astados de la ganadería de Francisco Chica. A partir de ese día comenzó una trayectoria artística muy irregular en la que en los sucesivos años se retiró y volvió a los ruedos en numerosas ocasiones, pero fue “su” plaza de Madrid, Las Ventas, la que siempre le reconoció su gran valía y devolvió con sonados triunfos la entrega que Chenel mostraba cada tarde en el ruedo en el que tantas veces había jugado y aprendido de pequeño.

ANTOÑETE Y EL TORO BLANCO

“Antoñete”, además, realizó el 15 de mayo de 1966 una de las faenas más importantes de la historia de la plaza de toros de Las Ventas. Fue ante el toro “Atrevido” de José Luis Osborne, un ejemplar ensabanado, de preciosa lámina y que fue todo calidad y nobleza en la franela del diestro madrileño. Fue un trasteo antológico en el que “Antoñete” hizo gala y mostró las virtudes y el gran concepto del toreo que poseía y por el que será recordado siempre en la historia del toreo. Fue uno de los más grandes exponentes del toreo clásico, puro y ortodoxo. También aportó a la tauromaquia su sabiduría del toro, el conocimiento que debe tener un torero de su oponente y fue todo un maestro en las distancias que se le deben dar a un toro para lograr aprovechar su viaje y embestidas. Durante toda su carrera sufrió serias cornadas y percances que le dejaron secuelas para el resto de su vida, pero el increíble valor y la afición que demostró por su profesión le hicieron no perder la ilusión y cuando estaba olvidado por público, crítica y profesionales volvió más fuerte que nunca. Su regreso a los ruedos en 1981 fue un auténtico revulsivo para la fiesta y devolvió a uno de los toreros mas completos e importantes para que las nuevas generaciones pudieran disfrutar de un “Antoñete” mucho más maduro y que realizó con mas de sesenta años auténticas obras de arte en numerosas plazas y, por supuesto, en Madrid. El 27 de agosto de 1988 se retiró definitivamente de los ruedos en Bilbao, aunque siguió toreando festivales y nunca se terminó de ir de la cara del toro.

ÚLTIMA ETAPA Y ENFERMEDAD

“Lo que no consiguieron los toros, lo consiguió el tabaco”, esta es una de las frases más dichas estos días por los familiares, amigos y compañeros del maestro Chenel porque si “Antoñete” tuvo una debilidad en su vida, esa fue el tabaco, un tabaco que le ocasionó graves problemas de salud y que finalmente acabó con su vida el pasado sábado. Hacía ya bastantes años que el veterano matador había dejado el que fue su vicio reconocido, pero los pulmones no olvidaron y en los últimos meses, “Antoñete” estuvo muy delicado de salud y aquejado de una grave enfermedad respiratoria. El pasado jueves 20 de octubre fue ingresado en el Hospital Puerta de Hierro de Madrid y, aunque todos tenían la esperanza de que Chenel saliera adelante y pudiera con este duro golpe de salud, desgraciadamente el corazón del maestro se apagó el sábado por la noche rodeado de sus familiares, amigos y compañeros de profesión. Pero el maestro del mechón blanco, como también se le conocía por el prematuro mechón canoso que le apareció siendo todavía joven, alcanzó una gran popularidad en los últimos veinte años por acompañar al periodista Manuel Molés en sus retransmisiones taurinas en Canal+ y en la Cadena SER. Desde ese momento ambos se hicieron inseparables y los conocimientos y la sabiduría del maestro Chenel le valieron el cariño y admiración de toda una generación que ha crecido escuchando los sabios comentarios del maestro con su característica y particular voz ronca y entrecortada.

MULTITUDINARIA DESPEDIDA

Ayer lunes todo el mundo del toro e infinidad de aficionados y admiradores de “Antoñete” pudieron rendirle un último homenaje y despedirse del maestro acudiendo a la capilla ardiente del espada que se instaló desde las 10 de la mañana en la Sala Alcalá de la Plaza de Toros de Las Ventas. Un gran número de aficionados y profesionales pudieron darle el último adiós a un “Antoñete” vestido de corto, con un traje verde botella de terciopelo, y rodeado por numerosas coronas de flores, un retrato de su juventud y su típico y característico traje de luces lila y oro que fue siempre su favorito y que vistió en la última tarde que actuó en la Monumental de Las Ventas. Muchos matadores de toros como Palomo Linares, Enrique Ponce o César Rincón, banderilleros como “El Boni”, al que dedicó las últimas palabras antes de morir, el equipo de canal plus con su gran amigo Manuel Molés al frente, críticos taurinos, ganaderos como José Luis Lozano, empresarios y, por supuesto, cientos de aficionados pasaron a lo largo de toda la mañana por la abarrotada capilla ardiente que fue clausurada a las 4 de la tarde, minutos antes de que el féretro de “Antoñete” fuera sacado, por última vez, por una puerta grande que consiguió abrir hasta en siete ocasiones, la puerta grande de la gloria, la puerta grande de Las Ventas, la que fue su casa y la que siempre será su plaza.

martes, 18 de octubre de 2011

Artículo de opinión

ALEJANDRO TALAVANTE, UN TORERO ÚNICO Y GRANDIOSO

Ya ha concluido la temporada taurina española y con ella atrás quedan infinidad de tardes de toros vividas en directo (en la plaza) o a través de la televisión. No sabría decir el número exacto de faenas, de corridas y de toros que he visto este año, pero si puedo decir que han sido muchas. Muchas han sido las faenas y lar tardes que he presenciado, pero en cambio son pocas las que creo recordaré durante mucho tiempo. El toreo es grandeza y, pese a que muchas tardes sean aburridas e incluso hagan enfadarte e indignarte, cuando tienes el privilegio y la suerte de contemplar una gran faena, una obra de arte firmada en un corto espacio de tiempo por un artista, el torero, ante un animal imprevisible, bravo y encastado, todo lo malo se olvida y esos diez minutos de éxtasis bien valen la pena. Pero de decenas y decenas de festejos, muy pocos son los que intercalan faenas grandiosas y esta temporada puedo contar con los dedos de una mano los trasteos que me han levantado del asiento y que han sido completos por el toro y el torero. Al margen de la tarde de la reaparición de José Tomás en Valencia en julio, que nunca olvidaré por su intensidad y emoción, si esta temporada tengo que elegir un torero, quedarme con uno de los muchos matadores a los que he tenido la oportunidad de ver, me quedo sin duda con Alejandro Talavante. Por encima del maestro “Juli” e incluso de Manzanares que vive el momento más importante de su carrera, el extremeño es para mí el matador de toros más importante y completo del momento. Talavante es un torero único, diferente a los demás y tiene algo que muy pocos poseen en este momento: verdad y pureza en su toreo. Alejandro Talavante es para mí el torero que, junto al gran José Tomás, se pone en el sitio más arriesgado y meritorio a la hora de torear. Estamos cansados de ver a matadores e incluso novilleros que realizan su profesión con infinidad de ventajas y mentiras. Incluso hoy en las escuelas taurinas se enseña el toreo “fácil”, ventajista y mentiroso, frente al toreo de puro y de verdad. Con el compás semicerrado, Talavante echa los vuelos de la muleta al hocico del toro, encaja los riñones y corre con despaciosidad y mano baja la franela hasta vaciar la embestida del animal en la mismísima cadera con un sublime muñecazo que le hace ser un auténtico prodigio. Talavante es de los pocos que sí se pasan la embestida de los toros por la faja y que no torean en línea ni con toques hacia fuera para despedir la acometida de sus oponentes. Por eso tiene tanto mérito que realizando el toreo de esa forma, tan de verdad, consiga templar a los toros y estirar el brazo para alargar la embestida. Y todo esto lo realiza no sólo ante ejemplares nobles, dóciles y aborregados, sino ante astados bravos y encastados, nada fáciles y que piden el carnet de identidad. Ahí está la faena al toro “Cervato” de El Ventorrillo, una auténtica obra de arte y un ejemplo de lo que es la emoción y la verdad del toreo. Esa es una de las faenas que nunca olvidaré y que han conseguido ponerme los pelos de punta esta temporada. La otra también ha llevado la firma de Talavante y tuvo lugar hace pocas fechas en el coso de La Misericordia de Zaragoza en la Feria del Pilar. Ante un gran ejemplar de Núñez del Cuvillo, Alejandro construyó un trasteo cargado de algo que también está en vías de extinción y que echamos mucho de menos: improvisación. Talavante improvisó sobre la marcha, cada muletazo era distinto y superior al anterior, nos enseñó muletazos originales, peculiares y que muchos desconocíamos…fue en definitiva toda una lección taurómaca. Y además de todo lo que he dicho anteriormente, las más grandiosas faenas del diestro extremeño se basan en el toreo al natural, con la mano izquierda, la mano de la que brota el llamado toreo “caro”. Su espejo es José Tomás y su asignatura pendiente era la regularidad y la espada. El ser más regular ya lo ha conseguido y ahora queda la tarea de la suerte suprema, pero hay tiempo porque Alejandro Talavante es muy joven y lleva en esto muy poco tiempo, algo que nos tiene que hacer darnos cuenta del nivel que puede llegar a alcanzar este torero genial, único y grandioso que recoge en su tauromaquia tantas y tantas virtudes: valor, temple, largura, profundidad, verdad, pureza, improvisación…

miércoles, 12 de octubre de 2011

Crónica corrida del 12 de octubre en Madrid


ANDRÉS PALACIOS LO INTENTA, PERO SE ESTRELLA CON UN LOTE SIN OPCIONES


El albaceteño lo intentó y destacó con el capote pero no pudo triunfar ante un lote sin opciones de triunfo. El mejor toreo de la tarde llevó la firma del mexicano Fermín Spínola que anduvo a gran nivel. Frascuelo dejó detalles de torería ante una corrida descastada e inválida de Valdefresno.



Para celebrar el día de La Hispanidad se celebraba en la plaza de toros de Las Ventas la tradicional corrida del 12 de octubre que, a la sazón, era la última corrida de toros de la temporada en Madrid porque el próximo domingo la Monumental de Las Ventas echará el cierre con una novillada con picadores. Y como tradicional es la corrida, tradicional ya es también, desgraciadamente, la floja entrada que se registra en los tendidos. Más de un cuarto de entrada para ver un cartel llamado “de Madrid” con dos toreros que triunfaron en verano.


ANDRÉS PALACIOS


Volvía a Madrid uno de los nuestros: Andrés Palacios, y lo hacía con cierto ambiente después de la gran faena que firmó al natural el pasado verano en la mismísima plaza de toros de Las Ventas. Junto a sus compañeros, el público de Madrid, le sacó a saludar al finalizar el paseíllo y antes de que se abriera por primera vez la puerta de toriles. La actuación del albaceteño fue positiva y dio una buena imagen, pero Andrés se estrelló ante un lote de escasas opciones de Valdefresno. Lo único lucido que pudo hacer en toda la tarde, lo realizó a la salida de su primero, el tercero de la tarde, al que recibió de forma soberbia a la verónica. Palacios meció los brazos con templanza, cargó la suerte y fue ganando terreno logrando unas magníficas verónicas que fueron rematadas por dos soberbias medias en el mismo centro del ruedo. Parte de la plaza, entre ellos el famoso tendido 7, en pie para aplaudir al diestro albacetense. Pero a partir de ahí poco pudimos ver de nuestro paisano por culpa de los dos astados que le correspondieron en suerte. El tercero ya apuntó cosas feas en el tercio de banderillas, y luego confirmó los peores presagios en la franela de Palacios. El animal del hierro de Nicolás Fraile tuvo nobleza, pero le faltó fuerza y clase. Llevó la cara suelta y siempre salía del muletazo con la cara arriba desluciendo mucho la labor de su matador. Andrés estuvo templado, queriendo, pero sólo pudo dejar constancia de su voluntad. Mató mal al igual que en el toro que cerró plaza. La espada fue lo peor de la actuación de Andrés Palacios porque lo que pudieron haber sido dos ovaciones, se quedaron en dos silencios. El sexto fue un ejemplar muy justo de fuerzas y descastado que no tuvo ninguna transmisión ni emoción y estuvo muy parado. Nada pudo hacer el manchego.


FERMÍN SPÍNOLA


El mexicano Fermín Spínola confirmaba su alternativa en Madrid después de once años de doctorado. Para muchos era un torero desconocido y por eso fue aun mayor la agradable sorpresa que los aficionados nos llevamos. Fue una tarde importante la de Fermín en la que demostró poseer un gran concepto del toreo y mucha templanza y largura en los muletazos. Además durante toda la tarde se le vio muy asentado y tranquilo. El toro de la confirmación fue un colorado (rara capa en este encaste Atanasio-Lisardo) que tuvo calidad y que humilló pero que fue un absoluto inválido al que Spínola apenas pudo bajar la mano. A pesar de la debilidad del astado, el espada mexicano logró varios naturales muy buenos que tuvieron mucha largura, templanza y profundidad. Pero aún mejor estuvo con el quinto, que fue el único toro bueno de un encierro bien presentado pero descastado y muy justo de fuerzas de Valdefresno. Este astado además de tener buena condición, si tuvo algo más de fuerza y embistió siempre humillando, colocando muy bien la cara y fue todo nobleza. Ante él Fermín cuajó una faena que era de oreja si la hubiera rematado con una buena estocada. Logró series de muletazos por ambas manos en las que corrió muy bien la mano, llevó templada la dulce embestida del animal y dejó constancia de un concepto clásico y muy español del toreo. Tras dejar una estocada muy baja, dio una merecida vuelta al ruedo tras petición.


FRASCUELO


El veterano Frascuelo volvió a “su” Madrid pero no pudo triunfar. Al torero de sesenta y tres años se le trató con mucho cariño durante toda la tarde y lo más destacado lo realizó en su primero en el que consiguió ejecutar dos buenas tandas de derechazos de mano baja en los que alargó mucho la embestida. Es verdad que toreó con ventajas y con el pico, pero que más se le puede pedir a un torero que se viste en un par de ocasiones de torero y que con esa edad no se arruga ante dos toros serios y de gran trapío. Durante todo el festejo los aficionados pudimos deleitarnos con su torería y con su toreo de sabor añejo que ya está en vías de extinción. La forma de andar por la plaza, los pases de desprecio, su forma de doblarse con los toros, las ganas que puso…sin duda, valió la pena ver a Frascuelo. El cuarto fue un pedazo toro que tuvo peligro y muchas complicaciones y al que mató de un bajonazo pescuecero.



FICHA DEL FESTEJO


Tradicional corrida del 12 de octubre, con más de un cuarto de plaza, se lidiaron cinco toros de Valdefresno y uno (6º) de Fraile Mazas, muy bien presentados, de bonitas hechuras y astifinas cabezas. De descastado e inválido juego en general salvo el buen 5º. 1º noble y con calidad pero inválido; 2º tuvo nobleza y clase pero no fuerzas ni casta; 3º noble pero justo de fuerzas y sin clase; 4º peligroso y complicado; 5º de buen juego; 6º inválido y descastado.


Frascuelo: Saludos con algunas protestas tras aviso y saludos con protestas.

Fermín Spínola (que confirmaba alternativa): Saludos desde el tercio y vuelta tras petición.

Andrés Palacios: Silencio y silencio tras aviso.


viernes, 7 de octubre de 2011

Noticia


EL PRÓXIMO SÁBADO SE CELEBRA EN ALBACETE EL FESTIVAL HOMENAJE AL BANDERILLERO MANUEL MONTOYA


El próximo sábado día 8 tendrá lugar en la plaza de toros de Albacete el festival taurino a beneficio de la viuda y las hijas del banderillero albaceteño Manuel Montoya, fallecido trágicamente el pasado mes de agosto. El que fuera novillero puntero y después gran hombre de plata de matadores como Dámaso González, César Jiménez o Rubén Pinar dejó en unas muy malas condiciones a su viuda y sus dos hijas y por esa razón el estamento taurino de la ciudad manchega se movilizó desde el principio para ayudar a la familia del subalterno. Primero fueron varios los matadores y personas cercanas al mundo del toro las que se solidarizaron económicamente con la viuda de Manuel y con sus hijas y después se puso en marcha esta iniciativa benéfica que supondrá una importante ayuda a la familia de Montoya. El cartel está compuesto por Enrique Ponce, Manuel Jesús "El Cid, César Jiménez, Cayetano, el alumno de la Escuela Taurina de Albacete Mario Julián Sotos y finalmente el rejoneador Manuel Manzanares que sustituirá al lesionado Francisco Rivera Ordóñez "Paquirri". La empresa SEROLO ha confirmado esta tarde el nombre del torero a caballo como sustituto de "Paquirri". Las reses serán donadas por las ganaderías de Zalduendo, Samuel Flores, Daniel Ruíz, Las Ramblas, Garcigrande, Juan Pedro Domecq, Sonia González y Encina Grande (propiedad de Manuel Caballero).

Desde el principio en el que se comenzó a pensar en poner en marcha esta iniciativa se apuntó muy alto y se dijo que iba a ser un festival histórico y uno de los más importantes en la Historia de la plaza de toros de Albacete. Pero el tiempo no ha hecho justicia a este deseo y finalmente el cartel no tiene un gran atractivo de cara al aficionado y al gran público. No hay presencia de las grandes figuras del toreo, a excepción de Enrique Ponce, no hay nombres albaceteños y hay matadores tan poco interesantes como Cayetano o el mismo Manuel Manzanares que ha sido la guinda del pastel. Después de su poco lucida actuación en la pasada feria, el menor de los Manzanares ha entrado incomprensiblemente e injustamente en el cartel. Esta era una buena oportunidad para demostrar lo unido que está el mundo del toro y que en Albacete hubieran comparecido las primeras figuras del escalafón y que se hubiera puesto el cartel de "No hay billetes". Con este cartel dudo bastante que se llene el coso albaceteño, pero tendremos que esperar al sábado para comprobarlo. El alto precio de las entradas tampoco conseguirá, seguro, animar a los aficionados para acudir a la plaza. De todas formas, y al margen de estas cuestiones, hay que felicitar a los organizadores por la iniciativa y a los participantes por realizar este bonito gesto. Pese a que no sea el mejor cartel, todos los aficionados de Albacete deberían acudir a la plaza para poner un granito de arena en el futuro de la viuda y las hijas de Manuel Montoya. Veremos cuál es la respuesta y ojalá se recaude mucho dinero.

Artículo de opinión


LA URGENTE NECESIDAD DE UN CAMBIO EN LA ESCUELA TAURINA DE ALBACETE


Todo el mundo lo sabe pero nadie dice nada. Todo Albacete sabe la situación que hay en la Escuela Taurina de nuestra ciudad pero todos callan por las posibles represalias, reacciones o consecuencias que puedan acarrear sus palabras, líneas, etc. Pero a mí no me da ningún miedo escribir porque creo que estoy en la obligación de denunciar la situación actual de la Escuela de Tauromaquia de Albacete porque todos los albaceteños están representados en ella (con sus impuestos) y porque estamos hablando de las ilusiones y el futuro de muchos chavales de nuestra ciudad. Está claro que la Escuela Taurina no funciona. Desde hace ya muchos años de la Escuela no ha salido ninguna primera figura del toreo, desde los tiempos de Manuel Caballero y, anteriormente, de Dámaso González. Hay y ha habido muchos chavales inscritos en la Escuela, pero ninguno a llegado a la primera fila del toreo y tan sólo algunos se han hecho hueco en las distintas ferias de la temporada española. Es verdad que la de torero es una carrera muy difícil y más hoy en día con la profunda crisis económica que atraviesa el país, pero está claro que algo se estará haciendo mal dentro de la Escuela Taurina para que se de esta situación. Además, mucha gente sabe (todos los familiares, amigos o conocidos de chavales que están en la Escuela) el descontento que reina entre los alumnos de dicha institución. En la Escuela Taurina se deben formar a toreros, pero también a hombres y se deben inculcar unos valores de disciplina, esfuerzo, dedicación, humildad… valores que hoy en día echamos en falta en la sociedad. Y como toreros no se debe limitar la enseñanza práctica del toreo en la Escuela, también se ha de enseñar la teoría del toreo. Es fundamental que los futuros novilleros y matadores conozcan en profundidad todo lo que rodea al arte del toreo. Ellos se van a jugar la vida y deben conocer los diversos encastes del toro bravo para después saber hacer frente a las distintas reacciones que tengan sus oponentes; deben de conocer la infinidad de suertes del toreo (más de 300) que existen; también tienen la obligación de conocer los terrenos, las distancias, la liturgia, la reglamentación taurina y, por supuesto, la Historia del Toreo. Todas estas materias han de ser cumplimentadas con un ejercicio y preparación físicas muy exigentes y la enseñanza del toreo práctico y de salón. Y para ello, la Escuela debe contar con unos maestros que de verdad se preocupen por los chavales, que estén en continúo contacto con ellos, que se hagan respetar y que estén al pie del cañón, haga frío o calor, junto a sus alumnos. La Escuela de Albacete es la que cuenta con un mayor presupuesto en comparación con las restantes escuelas taurinas de España y todo ese importante dinero que va a parar a la Escuela debe estar justificado y las cuentas deben ser claras y públicas. Si tan buen presupuesto tiene la Escuela creo que es normal que se exijan unas condiciones adecuadas y buenas para los chavales (trastos, viajes, tentaderos, novilladas). Tampoco deben primar las opiniones personales, sino las técnicas para que, habiendo igualdad, los mejores tengan mayores oportunidades. Mucho tiempo se ha perdido ya, así que con el cambio político en la ciudad esperemos que también se produzca el urgente cambio y renovación que necesita nuestra “fábrica” de nuevos profesionales taurinos.